A 71 días del primer caso confirmado de Covid-19 en el país, actualmente tenemos 34.381 casos confirmados de coronavirus con 346 fallecidos a la fecha. De estos la región de Coquimbo cuenta con 153 casos confirmados a la fecha con un fallecido. Ciertamente son cifras que preocupan ya que a medida que van pasando los días vamos comprobando que el contagio sigue creciendo, la famosa curva no se puede aplanar y que las medidas restrictivas no han sido del todo efectivas, con especial énfasis en el centro de mayor densidad poblacional que es Santiago, sumado a esto está la filtración por el medio “Interferencia” en donde se descubrió que el ministerio maneja información georreferenciada (cada infectado y su ubicación exacta en el mapa) demostrando que el ministerio maneja más información de la que entrega a las autoridades respectivas para un mejor manejo de la crisis.
En nuestra región y en especial nuestra provincia del Choapa podemos apreciar a primera vista de que en comparación a la capital y a distintas regiones que las cifras no son tan altas, y que eso ha provocado que nuestra población de alguna manera se haya ido relajando con las medidas de aislamiento y los toques de queda, como primer ejemplo en nuestra comuna de Los Vilos tomó al menos una semana de controles exhaustivos entre policía y militares detener la cifra de detenidos
por infringir toque de queda (basta con dar un breve vistazo en historias de redes sociales para apreciar que los carretes o las pichangas de fútbol aún no cesan) sin más ni menos el anterior fin de semana fue el día de la mamá y pudimos observar cómo la gente se volcó al comercio local con motivo de este festejo, lo cual no tiene nada de malo ni de ilegal, pero ante el pequeño detalle de que estamos en la peor pandemia en un siglo, que los testeos a nivel regional de Covid-19 están en una cantidad “indeterminable” de retrasos por la falla del laboratorio de Ovalle y el de Illapel que aún no entra en funcionamiento y que en particular en nuestro país tenemos un gobierno que hace las cosas al revés, priorizando ¨los negocios¨ y a los empresarios por sobre la sociedad en general, aprobando leyes de ¨protección al empleo¨ que más bien parecen de protección al empresariado (ya que los trabajadores están pagando esta crisis con sus ahorros de cesantía) y que en pos de este principio ha ido decretando cuarentenas parciales en la capital, lo que ha provocado que la tasa de contagio crezca, el sistema hospitalario en Santiago esté al borde del colapso con una ocupación de camas UCI cercana al 90 por ciento, sin insumos suficientes para los funcionarios de la salud ni tampoco de reactivos para toma de exámenes PCR y que desde regiones ya se estén derivando equipos de respiradores hacia la capital, pero el gobierno incólume y sin ningún tapujo sale a afirmar que la falta de insumos no es efectiva que contamos con todos aquellos necesarios para la labor sanitaria y de que tenemos el mejor sistema de salud posible.
Esta pronunciada alza de contagios que hoy en día marco la no despreciable cifra de 2660 contagios, por cierto, la más alta cifra diaria desde el inicio de la pandemia de nuestro país que provocó que el gobierno (por fin) decretase la cuarentena total para la totalidad de la región metropolitana genera una problemática enorme en la gente vulnerable y que actualmente está desempleada para encontrar una fuente de alimentación, podemos ver en canales nacionales reportajes como el de Bajos de Mena en Puente Alto donde se ve una gran cantidad de personas, muchos de ellos adultos mayores buscando lo que sobra en las calles después de las ferias libres para alimentarse, esto de por si es una realidad a nivel nacional, pero ante la contingencia se hace mucho más visible.
La CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) propuso la entrega de un ingreso básico de emergencia para la población más vulnerable por al menos 6 meses para poder resguardar su subsistencia, pero por más recomendaciones y evidencia internacional al respecto, recién hoy (día 71 de la pandemia) se logró aprobar el proyecto de ingreso familiar de emergencia que se entregará por un plazo de 3 meses, el primero de $65.000 pesos el primer mes, $55.000 el segundo y $45.000 el tercero al 60% más vulnerable de la población. Este ingreso aprobado resulta
absolutamente mezquino e insuficiente ya que está por debajo de la línea de la extrema pobreza y por más que se discutió tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, el gobierno no subió los montos de ayuda y ante el paso de los días y la situación de hambre que se está empezando a ver en el país, más el veto presidencial ingresado por el ejecutivo al respecto, no quedó otra más que aprobarlo ya que la gente no puede seguir esperando (triunfo para el gobierno, derrota para la gente).
De haber tenido una respuesta acorde y eficiente por parte del ejecutivo, decretando cuarentenas totales y saliendo en resguardo de sus ciudadanos promoviendo ingresos universales de emergencia de verdad útiles y no mezquinos de manera rápida y oportuna y no como lo ha hecho hasta el momento de manera errática con mucha improvisación y siempre defendiendo la economía y su funcionamiento ante las personas, no cabe ninguna duda de que esta situación sería diametralmente distinta y quizás a estas alturas en el día 71 de la pandemia estaríamos discutiendo la verdadera vuelta a la normalidad, y no aquel retorno seguro que nos vendieron como promoción de retail desde el ejecutivo que solo provocó el aumento de contagios y de que estemos recién entrando al comienzo del “peak de la pandemia”. Es por esto que este gobierno como se dice en el campo, pone la carreta delante de los bueyes, no prioriza a la gente y si a sus amiguitos del empresariado, es decir, ha hecho todo al revés de lo que la experiencia internacional dicta respecto de países con manejo exitoso de la pandemia.
Hoy una serie de alcaldes oficialistas afines al gobierno han salido a culpar a la gente por su “irresponsabilidad” por contagiarse, trasladando la culpa únicamente a quienes más están sufriendo por esta pandemia, pero en verdad solo una vez que termine todo este período de transmisión exponencial del virus y una vez retomada la nueva normalidad que está por venir, sabremos quienes en realidad fueron los verdaderos culpables del aumento del virus y aunque la gente que no se cuida y no respeta normas tiene que ver (en parte) con esto, son aquellos que dirigen este buque quienes tendrán que responder por la responsabilidad en el manejo de esta crisis.
Por Matthias Eyzaguirre Méndez @quilimarino, Asesor Jurídico, Emprendedor, ex candidato a Concejal por la comuna de Los Vilos y a Consejero Regional por la Provincia del Choapa (Independiente PS).
