Son cerca 1080 millones de m3 de agua embalsada, de un total de 1304 millones de m3 que posee la Región de Coquimbo.
La Dirección General de Aguas (DGA), del Ministerio de Obras Públicas, entregó el estado mensual de los embalses de la región, los cuales al 31 de julio, presentan un 83% de capacidad de agua embalsada con más 1.079 millones de m3, de un total de 1.304, 7 millones de m3 que posee la zona.
Esta situación reafirma las proyecciones de “poder contar con tres a cuatro temporadas de riego sin mayores complicaciones para la región, gracias a que tenemos gran parte de nuestras principales cuencas reguladas”, destacó la seremi de Obras Públicas Mirtha Meléndez, escenario más que favorable luego de casi 10 años de sequía.
Según la información proporcionada por la Dirección General de Aguas, en la cuenca del Río Elqui se presenta un panorama de casi completa capacidad, ya que el embalse La Laguna presenta un 100% de almacenamiento y Puclaro un 99%.
Por su parte en Choapa, los embalses Corrales y El Bato están en un 95% y 94% de capacidad respectivamente y Culimo, el único con régimen de almacenamiento pluvial, presenta un extraordinario 80% de llenado.
En Limarí, la cuenca con mayor capacidad de almacenamiento hídrico, cuenta con los embalses Recoleta y Cogotí con un 101% y 98% de llenado respectivamente, destacando el aumento del embalse La Paloma, que presenta más de 534 millones de m3 de agua embalsada, lo que corresponde al 71% de su capacidad.
A pesar de este positivo panorama, la titular del MOP en la región, Mirtha Meléndez, plantea que se debe ser cauto en la gestión y manejo de este recurso, ya que aún continúa el déficit en las recargas de las napas subterráneas de los principales acuíferos de la región, “las que demoran en promedio unos 9 años en recuperarse y todavía tenemos sectores con gran déficit, impactando principalmente en los sistemas de agua potable rural.
Finalmente la seremi, recalcó que la situación de los embalses podría seguir mejorando en los próximos meses, si consideramos que aún no se inicia la temporada de deshielos, la que aporta gran cantidad de recurso hídrico a las cuencas donde están emplazados estos embalses.