No son días fáciles para Chile. Desde ya hace unos días se vienen viviendo intensas jornadas de protesta, iniciadas en un primer momento en la capital por el alza del metro, pero esto solo fue la chispa que encendió la mecha y que deriva en este estallido social ante la serie de abusos que sufre el pueblo chileno, en donde esta gran Pulpería llamada Chile ahoga sistemáticamente con su sistema económico a la población con el alza de los servicios básicos, los bajos sueldos, las AFP, la salud en general, el CAE y la mala calidad de la educación, los peajes, la contaminación desmedida del medio ambiente y así podríamos seguir enumerando.
Para más desde el comienzo el gobierno en vez de llamar al dialogo solo ha ido agregando bencina al fuego con sus declaraciones incendiarias, en donde solo se habla de violencia, de delincuentes y de desmanes y que no le tembló la mano para decretar el estado de excepción constitucional y el posterior toque de queda para la mayoría de las principales ciudades del país. Más aún se instauró una política policial de ¨gatillo fácil” donde se les disparó directamente a los manifestantes sin ninguna discreción para luego hacer desaparecer a los policías de las calles, con la posterior consecuencia de mayores desmanes, incendios y posteriores saqueos para tener la excusa perfecta de sacar a los militares a la calle con las consecuencias lógicas de quienes reprimieron por tantos años a nuestro país.
Los estallidos sociales se vienen sucediendo alrededor del planeta, casos cercanos tenemos el de Ecuador, el de Cataluña o en Francia con los chalecos amarillos, pero en nuestro país tiene un cariz especial porque nos hemos caracterizado por ser un pueblo sumiso que no reclama ante los constantes abusos del sistema heredados desde la dictadura de Pinochet y que nuestra clase política no ha podido y no ha querido cambiar durante los años de nuestra reciente democracia.
Las manifestaciones no se van a detener, ni con toque de queda, ni con represión a punta de fusiles ni mucho menos con toda la televisión a disposición de los grupos económicos en donde solo nos van a seguir mostrando ¨desmanes”, “violentistas”, “incendios” (algunos de los cuales tienen registros que se han ido misteriosamente borrando de las redes sociales en donde muestran de manifiesto que algunos efectivos policiales inician intencionalmente), es por eso que hay que informarse a través de las redes sociales, la radio y medios independientes.
Es de esperar que este deslegitimado gobierno se saque la venda de los ojos y llame al diálogo, aunque todo nos indique que no vaya a ser así y que no termine en un autogolpe, que la presión de los movimientos sociales y las protestas que hoy cuentan con el apoyo de los portuarios, se sumen los camioneros, los mineros, los profesores y todos los gremios de manera pacífica para que de una vez por todas se inicie el proceso de cambiar la Constitución nefasta que nos rige y se acaben los abusos que son el pan de cada día en este país al sur de Estados Unidos llamado Chile.
Matthias Eyzaguirre Méndez, Asesor Jurídico, Dirigente Rural, Emprendedor, ex candidato a Concejal por la comuna de Los Vilos y a Consejero Regional por la Provincia del Choapa (Independiente PS).