
Un sujeto fue detenido por personal de Carabineros de Illapel mientras realizaban controles rutinarios a vehículos en la ciudad incluyendo el test de alcotest.
El conductor del móvil fue fiscalizado arrojando 2.97 grado de alcohol, situación que determinó su detención por hacerlo en flagrante estado de ebriedad.
Y es en ese momento en donde el detenido le ofrece $ 20.000 en en efectivo al funcionario policial por dejar el procedimiento sin efecto, notificándole en ese momento el uniformado que de igual forma se mantenía detenido por cohecho y conducción en estado de ebriedad.
La policía constató además la existencia de la documentación vencida del vehículo,
siendo retirado de circulación.