Vecinos de Caimanes denuncian escurrimiento de aguas servidas desde fosa séptica provisoria sin solución tras meses de reclamos

Doce familias del sector Villa Las Margaritas, en Caimanes, denuncian que desde marzo viven con el rebalse constante de una fosa séptica provisoria instalada sin previo aviso por una empresa que ejecuta trabajos de alcantarillado en la zona. Según relatan, las aguas servidas han escurrido durante meses por los accesos a sus viviendas, generando malos olores, riesgos sanitarios y dificultades para transitar.

De acuerdo con el testimonio de uno de los vecinos afectados, la fosa fue instalada en marzo “sin ninguna reunión ni aviso previo a los parceleros”, en la entrada de las parcelas El Pimiento, ocupando la mitad del camino que utilizan las familias para ingresar.

El problema comenzó a agravarse en abril, durante Semana Santa, cuando la fosa se rebalsó por primera vez debido a la falta de retiro de aguas. “Desde entonces, el rebalse se repite cada cierto tiempo. En septiembre, para el 18, el agua corrió más de 50 metros, y ahora volvió a pasar lo mismo”, señaló el vecino, quien afirmó que han debido mantener sus casas cerradas por los malos olores y que los niños “ya no pueden andar en bicicleta ni pasar por el camino sin ensuciarse con aguas servidas”.

Los afectados aseguran que han informado reiteradamente la situación a la Municipalidad de Los Vilos y al delegado municipal de Caimanes, quienes les habrían prometido reubicar la fosa provisoria. Sin embargo, el compromiso no se ha concretado. “Nos dijeron que ya estaba aprobado el cambio de lugar, pero han pasado más de tres meses y no pasa nada”, lamentó el vecino.

La fosa en cuestión fue instalada como medida temporal mientras se ejecutan trabajos en la red principal de alcantarillado de Villa Las Margaritas. No obstante, el sistema no ha dado abasto para recibir las aguas de la población, provocando filtraciones y rebalses frecuentes.

Hasta el cierre de esta edición, ni la empresa a cargo de las obras ni las autoridades municipales han entregado una solución definitiva a las familias, que exigen medidas urgentes para evitar nuevos escurrimientos y riesgos para la salud de los habitantes del sector.