Vecinos del balneario de Pichidangui han organizado un gran bingo con un propósito especial, la recaudación del dinero es para la realización de pruebas y análisis del agua potable que hoy consumen y que distribuye la empresa sanitaria San Isidro.
La comunidad mantiene aprehensiones respecto a la calidad de agua que están bebiendo, pese a la certificación entregada por la Superintendencia de Servicios Sanitarios y la Seremía de Salud de la región.
La desconfianza radica en los múltiples problemas que ha presentado la sanitaria por más de 14 años y que supone, habría solucionado con la instalación de una planta 
desalinizadora en el lecho del río de Quilimarí, donde se extrae el agua desde uno de los pozos para el abastecimiento de la población.
Ante la desconfianza que aún reina en los vecinos de Pichidangui, un grupo de ellos ha decidido realizar gestiones para determinar si el agua potable que consumen cumple con las normas establecidas. Para esto, han programado la realización de un gran bingo para el 17 de noviembre a las 17 horas, en la sede del club deportivo de Pichidangui, a objeto de reunir dinero para el análisis de muestras en laboratorios particulares acreditados.
De esta forma, se busca tener certeza científica respecto a la calidad del agua con el único fin de dar tranquilidad a la población, según manifestaron los organizadores.
