A estas alturas, es casi imposible sorprenderse ante las noticias que anuncian la llegada de vehículos aéreos a gran escala.
Lamentablemente, este tipo de proyectos suelen situarse en un futuro muy lejano, viéndonos obligados a calmar nuestra curiosidad con los prototipos que desde años muestran las películas de ciencia ficción. Un avance tecnológico de proporciones épicas que, a la vista de los últimos acontecimientos, necesitaba el empujón de uno de los grandes gigantes del sector.
Ni Porsche, ni Tesla, ni BMW, el primer taxi aéreo de la historia correrá a cargo de la empresa internacional Uber Technologies Inc. La experta en redes de transporte privado da ahora el salto al ámbito público con Uber Air, un servicio de taxis voladores que emprenderá su particular aventura en la segunda zona urbana más poblada de Estados Unidos: Los Ángeles. El modelo definitivo de la aeronave fue presentado el pasado 8 de mayo en la feria tecnológica Web Summit, donde el responsable del producto, Jeff Holden, definió el vehículo como una especie de helicóptero totalmente eléctrico y silencioso.
Sin embargo, lo más emocionante del proyecto es su fecha de comercialización. Tal y como han confirmado desde la compañía, la futura flota de Uber Air comenzará su travesía al otro lado del charco en 2023, dentro de solo cinco años. El equipo ha querido “mostrar los avances que se están produciendo en las diversas áreas que son necesarias para que Uber Air sea una realidad en 2023. Esto incluye el diseño de múltiples vehículos, una nueva tecnología de baterías, mejoras en la producción y el sistema operativo que permitirá una operación más segura, precisa y respetuosa con el medio ambiente“, aseguró Holden durante la presentación.
Un plan millonario y de gran potencial
El presupuesto inicial del proyecto supera los 250 millones de euros, de los cuales una ínfima parte corresponde a la construcción de la unidad inaugural. Como hemos visto anteriormente, esta utilizará una batería 100% eléctrica, podrá despegar y aterrizar en vertical en menos de un minuto y alcanzará una velocidad de entre 241 y 321 kilómetros por hora. Un ritmo que se reduciría a 15 minutos en un trayecto que en coche supera las dos horas de duración.
Unas ventajas que se alejan bastante a la hora de hablar del precio, muy superior al del resto de servicios de transporte público. Por ejemplo, un viaje de Madrid a Segovia valdría aproximadamente unos 120 euros. Al menos hasta la implantación definitiva, momento en el que la empresa vaticina una reducción de costes de casi el 80%. Uber Air “generará grandes cambios a nuestras ciudades y vidas: viajes diarios más rápidos, menor congestión del tráfico y un aire más limpio en todo el mundo”, explicó la compañía.
