Primo chef de Martín Cárcamo convoca a cenas clandestinas marinadas en pisco

Se trata del chef Maximiliano Rivera Papic, quien a sus 28 años se dedica a generar espacios de cenas clandestinas y hoy comienza un ciclo de comidas maridadas en pisco.

Los inicios de Maximiliano Rivera Papic (@riverapapic), primo hermano del animador Martín Cárcamo, estaban lejos de la cocina; ingresó a la universidad a estudiar Ingeniería Comercial, pero después de dos años no pudo obviar su pasión por las artes culinarias. Todo partió por el oficio de su padre quien vendía indumentarias a restaurantes, donde desarrolló su interés por el mundo gastronómico.

Hoy cocina para grandes empresarios, se dedica a un proyecto personal de cenas navideñas para gente en situación de calle y además convoca a cenas clandestinas a través de aplicaciones y redes sociales a todo público.

“Partió porque me gusta cocinar para mis amigos, gente conocida. Y como una forma de hacer un poco de lucas mientras estaba estudiando. De ahí me di cuenta que había gente que lo hacía de forma más comercial, que era un nicho”. A los 22 años realizó sus primeras cenas clandestinas. Tan pronto partió, comenzó sus estudios de gastronomía.

Es por esto, y sus ganas de innovar, que el chef se encuentra actualmente en una alianza con el nuevo pisco Brujas de Salamanca (@brujasdesalamanca), donde realizará una cena clandestina mensual – durante 6 meses- para deleitar a los comensales con platos de distintos tiempos maridados en pisco.

“Soy piscolero de toda la vida. También me gusta el pisco sour. En mis viajes el único requisito era que me mandaran pisco y Super8. No soy de los que disfruta del pisco solo, me gustan las preparaciones con él. Brujas de Salamanca es ahumado, tiene un sabor especial que lo hace más parecido al whisky, por eso me lancé a la olla e inicié este ciclo de cenas para los que se atrevan a probarlo”, afirma Rivera.

El chef anunciará las cenas a través de sus redes sociales para quienes estén interesados en inscribirse, la gracia de esto, es que serán en lugares itinerantes y se compartirá mesa con personas no siempre conocidas, lo que es una tendencia a nivel mundial y deja muy buenas experiencias, según el propio Max.

“Mucha gente ofrece sus casas para hacer cenas clandestinas, la idea es generar un ambiente más íntimo, y por lo mismo muchas personas terminan pololeando o creando lazos de amistad que nacen en la misma cena. Normalmente asisten de a dos, en pareja, con un amigo, etc. pero también nos ha tocado que van solos y ahí se produce un intercambio muy rico, situaciones muy únicas”

Respecto al menú, el chef asegura que serán sorpresivos y no comunes, los que además irán en diferentes tiempos para mostrar un pedazo de sí mismo en distintos platos, contando con distintos sabores, texturas y técnicas que adquirió en su paso por Europa, y que hoy quiere dar a conocer a los paladares chilenos. Además, Maximiliano afirma que todo lo que prepara se monta en vivo, lo arma frente a las personas: “mis cenas clandestinas tienen ese sello, que los asistentes vean, experimenten y aprendan también a cocinar”

Para más información, podrás enterarte de los ciclos de cenas clandestinas en el instagram @riverapapic