El cultivo de hortalizas hidropónicas bajo invernadero permite un ahorro de agua de hasta un 60% por lo que las y los beneficiarios han visto a este sistema como un salvavidas ante la crisis hídrica.
Ema López, agricultora de Punitaqui no tiene agua, sus olivos están secos y lo único que le queda es su cultivo de hortalizas hidropónicas bajo invernadero, el cual abastece mediante la compra de agua potable.
Para ella, al igual que para otras 45 familias de las comunas de Canela, Combarbalá, Punitaqui y Monte Patria, implementar el sistema de cultivo de hortalizas hidropónicas propuesto por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA Intihuasi en el programa “Transferencia tecnológica para cultivo de hortalizas hidropónicas en la Región de Coquimbo”, financiado a través del Programa de Gestión Territorial para Zonas Rezagadas del Gobierno Regional, ha significado un verdadero salvavidas ante la crisis hídrica que enfrenta la región, ya que se trata de un sistema que requiere una cantidad de agua baja, pudiendo reutilizar la misma en varios ciclos productivos, alcanzando un ahorro de hasta un 60%.
De hecho, López compra el agua “a medias” y la hace rendir “al máximo”. “Yo no tengo pozo, entonces compro agua, ahí nos tenemos que ir acomodando, ver con otra persona comprar mitad y mitad para abastecernos, lo que sí no es todos los meses porque como esta producción ocupa menos agua, nos favorece”, comentó la agricultora, para quien la venta de lechugas hidropónicas ha significado un ingreso extra para su hogar, el cual complementa con su jubilación.
“Hago rendir el agua al máximo porque de otra forma no podría y no podría vender y no podría seguir produciendo, pero gracias a Dios está esto y yo estoy contenta con ello”, expresó López, quien además de cultivar lechugas comenzó con el cultivo de albahaca, para diversificar su producción hidropónica.
Y es que, si bien la hortaliza estrella del cultivo en mesones con sistema de raíz flotante bajo invernadero es la lechuga, la iniciativa contempla enseñar cuatro tipos de cultivos factibles de producir con esta metodología, siendo el segundo de ellos, la albahaca.
Víctor Pizarro, coordinador del proyecto de INIA, fue el encargado de enseñar a los 46 beneficiarios y beneficiarias la técnica para el nuevo cultivo en el Día de campo: Cultivo de Albahaca en Sistema Hidropónico de Raíz Flotante, desarrollado en Colliguay, Monte Patria, destacando el compromiso de las y los agricultores, “se les enseñó, en el primer ciclo, la producción de lechugas, y ahora entramos, durante el verano, a producir albahaca de manera de poder entregar también otras posibilidades de diversificar sus productos y así abastecer a las zonas interiores de estos vegetales”, expresó Pizarro, asegurando que el avance de las y los beneficiarios “ha sido notable”. “Ellos ya se encuentran con conocimientos bastante avanzados en cuanto a la producción de hortalizas de hojas y esto les ha permitido obtener de ocho a nueve ciclos productivos que les permite un aumento mensual de sus remuneraciones que contribuyen a sus ingresos familiares”.
Bernarda Argandoña, del sector de Colliguay, en Monte Patria, ya comenzó a cultivar albahacas, por lo que se encuentra muy entusiasmada, “estoy muy contenta ya que están creciendo bonitas sin ningún problema, ya tengo ofrecidas albahacas”, indicó, asegurando que desde que comenzó con el sistema ha vendido toda su producción.
Para Omar Araya de Punitaqui, la experiencia ha sido bastante bonita. “Hasta ahora ha estado muy bien, así es que muy contento y ahora iniciando lo que es la albahaca, estamos aprendiendo de esto porque para nosotros es nuevo, con los técnicos que nos están enseñando paso a paso como cultivar, hasta que la albahaca de su producto final y poderla vender en un buen precio”.
Es importante mencionar que el Programa Transferencia Tecnológica para Cultivos de hortalizas hidropónicas en la Región de Coquimbo, atiende a 46 beneficiarios/as de los cuales el 61% son mujeres campesinas y consideró la habilitación de sistemas hidropónicos bajo invernaderos, con seis módulos productivos en sistemas de raíz flotante; asistencia técnica y entrega de insumos de manera permanente, destacándose la metodología “aprender haciendo”.
Actualmente los beneficiarios cuentan con un año en la producción de lechugas hidropónicas, donde se han evaluado 12 variedades de lechuga, esto ha permitido incrementar el ingreso mensual de cada familia participante en un 100% respecto al ingreso promedio.
Para el seremi de agricultura, Christian Álvarez, beneficiar, sobre todo a quienes se dedican a la agricultura familiar campesina con un sistema tan eficiente en materia hídrica como la hidroponía, considerando la baja disponibilidad del recurso en la región, es una misión de suma importancia, “como Minagri estamos comprometidos a buscar alternativas que mejoren la situación de miles de campesinos y campesinas ante la crisis hídrica, que afecta, sobre todo a la agricultura familiar campesina, nos enorgullece que 46 familias de zonas rezagadas estén comprometidas con persistir en la agricultura a través de este tipo de alternativas”.
Acerca de INIA
El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) es la principal institución de investigación, desarrollo e innovación agroalimentaria de Chile. Vinculada al Ministerio de Agricultura, cuenta con presencia nacional y un equipo de trabajo de más de 1.000 personas altamente calificadas. Ejecuta al año un promedio de 400 proyectos en torno a 5 áreas estratégicas: Cambio Climático, Sustentabilidad, Alimentos del Futuro, Tecnologías Emergentes, y Extensión y Formación de Capacidades. Estas iniciativas contribuyen al desarrollo agroalimentario sostenible del país, creando valor y proponiendo soluciones innovadoras a los agricultores, socios estratégicos y la sociedad, generando una rentabilidad social que varía entre 15% y 25%, por cada peso invertido en cada uno de sus proyectos.