Inédita búsqueda de desaparecidos de la dictadura chilena en el Cuartel de Cerro Chena

Por primera vez en más de 50 años, peritos policiales y familiares de víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) ingresaron al Cuartel N°2 de Inteligencia de Cerro Chena, en Santiago de Chile, para buscar restos de detenidos desaparecidos. Este hecho marca un hito en la larga lucha por esclarecer el destino de quienes fueron vistos por última vez en este lugar, señalado por testigos como un posible «cementerio clandestino».

El operativo, que contó con la presencia de representantes de la Corporación Memorial Cerro Chena, se llevó a cabo en un ambiente inusual: el cuartel, que solía estar bajo control militar, se encontraba casi despejado y disponible para las labores de búsqueda.

“Hemos luchado durante años para llegar a este momento. Es un paso importante en nuestra búsqueda de verdad y justicia”, expresó Mónica Monsalves, presidenta de la Corporación Memorial Cerro Chena e hija de Adiel Monsalves, un trabajador ferroviario ejecutado en 1973 en este mismo lugar.

Un lugar marcado por el horror

Cerro Chena, ubicado al sur de Santiago, fue un centro de detención y tortura durante la dictadura. Según testimonios, al menos una veintena de personas fueron vistas por última vez en este recinto militar. Aunque en 2001 se realizó un primer ingreso judicial al lugar, no se lograron avances significativos.

Esta vez, los equipos de peritos utilizaron tecnología de punta, como georradares, para detectar anomalías bajo tierra que podrían indicar la presencia de restos humanos. “Esta herramienta nos da más certeza, aunque sabemos que es probable que no encontremos cuerpos completos, sino solo huellas de lo que ocurrió aquí”, explicó Monsalves.

Operación “Retiro de Televisores”

Uno de los mayores obstáculos en la búsqueda de los desaparecidos es la llamada operación “Retiro de Televisores”, una maniobra de la dictadura para exhumar y trasladar cuerpos clandestinamente, con el fin de ocultar las evidencias de sus crímenes. Este operativo se intensificó tras el hallazgo de osamentas en 1978, lo que dificulta aún más la labor de los investigadores.

Testimonios y tecnología

El trabajo en Cerro Chena se basa en testimonios de sobrevivientes, documentos históricos y fotografías aéreas de 1975, que permitieron identificar 15 áreas de interés dentro del cuartel. Entre los puntos clave se encuentra una antigua escuela rural, utilizada como centro de detención y tortura, que hoy se encuentra en estado de abandono y es usada como bodega.

“Este lugar es testigo del sufrimiento de nuestros familiares. Estamos aquí para saldar una deuda histórica y, aunque sea encontrar un pequeño rastro, nos ayudará a cerrar este duelo eterno”, afirmó Monsalves.

Justicia y memoria

La búsqueda en Cerro Chena fue posible gracias a una querella criminal presentada en noviembre de 2024 por la inhumación y exhumación ilegal de Manuel Silva Carreño, un obrero agrícola detenido y desaparecido en la localidad de Paine tras el golpe de Estado.

“Confiamos en que estas diligencias, realizadas por profesionales especializados, permitan avanzar en la búsqueda de justicia para las familias que llevan más de 50 años esperando respuestas”, señaló Alejandra Arriaza, abogada querellante en el caso.

Cerro Chena no es el primer recinto militar en ser investigado. Otros lugares, como la Brigada de Operaciones Especiales de Peldehue, el Polígono de Artillería de Linares y la Escuela de Suboficiales de Maipú, también han sido escenario de búsquedas similares.

Este operativo representa un paso más en la lucha por la verdad y la justicia en Chile, un esfuerzo colectivo para honrar la memoria de quienes desaparecieron durante uno de los períodos más oscuros de la historia del país.

Fuente: EFE
Fotografías: Ailen Díaz / EFE